La renovación del abono de la Feria del Toro de San Fermín, que podrá realizarse hasta el próximo 21 de junio a las 13 horas, volvió a congregar ayer a cientos de personas que hicieron cola para poder asegurar sus entradas. Aquellos que no lo hagan en ese tiempo, perderán el derecho al abono, por lo que los interesados intentan acudir a la plaza de toros en cuanto el plazo se abre, según la web de Diario de Noticias.
"Venimos por tradición familiar. Además, desde que mis hijos son mayores, es uno de los momentos que podemos disfrutar en las fiestas con mayor tranquilidad", afirmaba Conchi Sánchez, habitual en la Feria del Toro y cuyo abono es heredado. No obstante, también hay quien ha adquirido su propio abono, como es el caso de Rosa Moler, vecina de Pamplona. "Lo tengo desde hace un año. Ahora hay abonos de sobra, antes una persona podía tener 4 o 5 pero la crisis se nota", comentó Moler.
"Vengo aquí desde siempre, y seguiré haciéndolo hasta que pueda. Es tradición", afirmó María Pilar Solves, que, a sus 83 años, acudió a la taquilla acompañada por su familia. Y es que el tiempo de espera es una nimiedad cuando lo que está detrás es el abono para poder ver a toros y toreros durante todas las fiestas de San Fermín.
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