Los toros de José Escolar han corrido un encierro de 4,05 minutos casi repetido al del año pasado: un toro se ha vuelto en pleno Santo Domingo como ya ocurriera con el famoso 'Curioso' en el encierro año 2015.
En este caso ha sido 'Cuentacuentos' el que ha decidido no seguir a sus hermanos en este tercer encierro. Sin embargo, en este caso el toro no ha bajado hasta los corrales y ha hecho el encierro junto a los cabestros de cola.
Junto a Casa Seminario, en la zona final de la cuesta antes del llegar al Ayuntamiento, el toro ha embestido contra el vallado y ha volteado violentamente a un joven, que tiene una cornada en el tórax. Además, hay otro herido por asta y varios contusionados y heridos por la violencia de la carrera, con decenas de caída, golpes y trompicones. De hecho, los toros han resbalado y caído en varias ocasiones, además de que se han producido varios conatos de montones en el recorrido.
La realización de las imágenes de TVE apenas ha permitido seguir lo ocurrido a los espectadores durante el tiempo que el toro ha quedado suelto, ya que en la televisión pública se han mostrado más preocupados por explicar las pulsaciones de un corredor tras el encierro, algo sin interés alguno para los espectadores.
Resulta casi vergonzoso ver en qué han convertido los encierros y hasta qué punto han decidido renunciar a la esencia de la carrera por un espectáculo televisivo al estilo Sálvame en el que los propios presentadores y sus invitados son ya más importantes y protagonistas que el propio encierro y lo ocurrido en las calles.
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